ALGO LE APESTA A AMLO

Como usted, apreciado por aferrado lector de EL AJUSTE bien sabe, el caso de los estudiantes en Ayotzinapa ha destapado una pestilente coladera que está ensuciando a varios actores políticos del país y ha mostrado al mundo lo oscuras y escabrosas que son las relaciones entre el crimen organizado y el Estado mexicano. Desde hace algunos días hemos estado tratando de explicar las relaciones incómodas en Guerrero en las que están implicados todos los partidos políticos: PRI, PAN, PRD, etcétera. Hoy, si usted me lo permite, hablaremos del caso del líder de Morena.

Hace poco el PRI dijo que si AMLO no estaba implicado, por lo menos había pecado de omisión en el caso del ex presidente de Iguala, José Luis Abarca. Además lo llamaron a responder por tal omisión.

El dirigente del partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena), Andrés Manuel López Obrador, dijo en el Zócalo, durante su primer mitin como partido político, que no tiene relación alguna con dicho ex alcalde y dijo así…

«Quiero aprovechar este momento para aclarar una información tendenciosa, de mala fe, porque quieren involucrarnos en ese propósito… Ya sé hasta lo que sigue. Van, después, a llamar a no votar, con ese argumento, de que todos somos iguales. Nunca en mi vida, como dirigente social, como dirigente político, he establecido relaciones de complicidad con nadie»

«En el caso de Iguala no conozco, al expresidente municipal prófugo y miren que no es un asunto sencillo, porque yo estoy constantemente recorriendo el país…»

«Durante el tiempo que (Abarca) fue presidente municipal, fui cuando menos tres veces a Iguala y hasta dormí en esa ciudad y nunca lo vi. Porque cuando estos políticos tradicionales andan en malos pasos, hasta se alejan de nosotros. Y eso ahora lo tengo que agradecer».

«Aclaro todo esto porque hasta los amigos y simpatizantes, a veces, dudan. No se preocupen».

Pero ya la revista Proceso, el 20 de octubre del 2014, había sacado un artículo llamado «El explicable silencio de López Obrador» en el que se AMLO había evitado pronunciarse sobre la relación del exsecretario de Salud guerrerense Lázaro Mazón Alonso con José Luis Abarca, el ahora prófugo expresidente de Iguala y miembro del grupo criminal Guerreros Unidos.

Mazón había sido elegido por AMLO para ser el candidato a gobernador del estado (Obrador lo habría anunciado públicamente el 8 de junio en Acapulco). Mazón, por su lado, había propuesto a Abarca para la presidencia municipal y, a cambio, el hermano de Lázaro,  Luis Mazón, quedó como suplente del alcalde, y su hermana Fabiola como secretaria de Desarrollo Social del ayuntamiento. ¿Qué le parece?

Tiempo después, Mazón fue destituido por Ángel Aguirre (el ahora ex gobernador de Guerrero) para que fuera a declarar y explicara sus relaciones con Jose Luis Abarca por orden del propio gobierno federal.

Reforma publicó, el domingo pasado, que AMLO había avalado la candidatura de Abarca a pesar de que le habían advertido de los nexos criminales y así lo dijo….

«Óscar Díaz Bello, actual diputado local, expresó el 12 de mayo del 2012 directamente a López Obrador su preocupación de que la coalición de partidos de izquierda (PRD, PT y Movimiento Ciudadano) apoyara a Abarca»

Díaz Bello, quien contendía en ese momento contra Abarca, explicó a AMLO el parentesco de Pineda con jefes del crimen organizado y las sospechas de lavado de dinero.

Reforma afirma: «Ese día, López Obrador cumplía una gira por Guerrero. Al hacer escala en Iguala fue recibido por una muchedumbre dividida en simpatías… Al llegar al templete, ubicado en las calles de Bandera Nacional y Juan N. Álvarez, el tabasqueño saludó a Abarca y a su esposa, quienes portaban playeras en apoyo al candidato presidencial, del otro lado estaba Óscar Díaz con sus simpatizantes»

Las pancartas de la gente decían: «Lázaro, no engañes a AMLO, en Iguala, Óscar ganó las encuestas»

SDP acusa a PRD de usar caso Ayotzinapa para hacer guerra sucia contra AMLO

El 7 de octubre, SDP noticias publicó un artículo en el que acusaba al PRD de hacer una guerra sucia contra Morena y su dirigente moral.

Señalan al diputado federal, Fernando Belaunzarán (de la corriente de “Los Chuchos”) de apuntar el nexo entre Abarca y Obrador a través de Mazón Alonso.

Iguala y la política mexicana: el pestilente lodazal

SDP defiende al Peje, Proceso siembra la duda, Reforma lo ataca con todo, ambos en defensa de línea editorial. ¿Eso está mal? Pensamos que para nada, ya que  desde el nacimiento de los diarios y desde que México existe como país, cada fuerza política ha tenido su propio medio para hacer oír su voz. El siglo XIX mexicano estaba lleno de tantos periódicos como ideas y actores políticos había entonces.

Claro que entre tantas voces hay quienes pretenden, desde su editorial, “encaminar” la opinión publica y uno debe aprender a discernir de manera crítica y de establecer una posición. No podemos dejarnos encaminar por el tren noticioso sin detenernos un momento y decir ¿por qué este medio me está informando esto?

Lo importante es ver que cada quien lleva agua para su molino. El PRI hace caso a Guerrero por la demanda civil, por la atención internacional, pero, sobre todo, porque es el problema de otro partido: el PRD. No vemos que, por ejemplo, alguien se escandalice por la insostenible situación de violencia que se vive en el Estado de México, o que en Michoacán haya rodado la cabeza de Fausto Vallejo con la rapidez que rodó la de Aguirre, recordemos que también se supo que el gobernador sustituto, Jesús Reyna, tenía vínculos con Los Caballeros Templarios.

Por otro lado, el PRD trata de sembrar una duda razonable sobre los nexos entre Morena y Abarca para tratar de evitar que la atención siga estando meramente sobre ellos.

Además, a pesar de que AMLO dijera la verdad y no conociera a Abarca, ¿no sería esto también criticable? ¿Cómo es que no conoce los vínculos de Mazón con Abarca? ¿Por qué no se investigó a la gente a cuya campaña se están sumando? Piense mal y acertará.

A Abarca ni AMLO lo denunció, ni ningún otro político con los que también se fotografió, y eso solo nos muestra una cosa: a todos los políticos de gran calaña de todos los partidos les importa muy poco saber quién está en los escaños menores. Los políticos locales siempre son figuras borrosas y que, en algunos casos, llegan a ser sombrías, tal es el caso del ex presidente municipal de Iguala o funcionarios locales en el caso de Michoacán.

Lo que sí nos debe preocupar, en todo caso, son dos cosas: la política local está en manos de gente que no es investigada por los propios partidos políticos que, por unas cuantas monedas, les abren la puerta a toda clase de bandoleros de cuello blanco y manos manchadas de rojo. Por otro lado, la agenda noticiosa nos quiere llevar a creer que el crimen del que fue víctima la ciudadanía en Iguala, la desaparición de los 43 y las balaceras, es un caso especial y asilado, pero no es así, la violencia en otros estados, en especial, la del Estado de México, es enorme y eso implica que hay que hacer cambios sistemáticos en nuestro país. Esas sí son las reformas que se necesitan y que la ciudadanía con gusto aplaudiría, las que modifiquen la forma y manera en que se hace política en el país.

Al final, lo verdaderamente preocupante es que los políticos, en vez de proponer verdaderos cambios, solo se están echando la bolita y embarrando a tantos como puedan, las notas en los medios reflejan eso. Ayotzinapa reveló solo la punta del iceberg y que el país necesita un cambio que no solo sea que rueden las cabezas de varios políticos, sino que nuestro sistema político realmente nos garantice que no vamos a desaparecer en la comunidad fulanita de tal, en donde el crimen ha penetrado tanto que dirige al propio gobierno local.

Los mexicanos necesitamos garantías, certezas, de que nuestra seguridad no corre peligro. Queremos justicia, no nos interesa el color de los partidos. He dicho.

Desde luego que su opinión es la que cuenta así que le pido, por favor, que nos la cuente ya que nos interesa saber si, para usted, vamos en la dirección correcta o solo le estamos haciendo al cuento.

Sea como fuere mejor aquí le paramos, nos vemos mañana hora y lugar de costumbre cuando tengamos un número más de EL AJUSTE DE CUENTOS, pero ahora y por favor ya no le haga usted más al cuento y ¡ya váyase a trabajar! pero eso sí, trabaje mucho, pórtese bien y sea feliz.