Las descalificaciones
de ida y vuelta, las pintas de barbas y bigotes en la propaganda de las
candidatas, la destrucción de mantas, las patadas bajo la mesa y todo lo demás
permitido en una contienda electoral con características de guerrilla urbana
han terminado desde hace unos días.
Ayer los
“suspirantes” tuvieron su último encuentro, su último agarrón y este fue en las
urnas a las que acudimos todos los que tenemos y sentimos la obligación de
elegir, si que nos impongan, a los funcionarios que han de dirigir, esperemos
que por buen rumbo, los destinos de los Ayuntamientos para los que fueron
electos y a los diputados que han de aprobar las propuestas de ley que
consideren en beneficio de la comunidad o, en su caso, desecharlas si
consideran que puedan, para mal, afectar a quienes los eligieron.
En unas horas más
podremos celebrar el triunfo o lamentar la derrota de nuestros candidatos una
vez que el IEQROO de por válidos los resultados previos que normalmente marcan
la tendencia de la votación.
Por lo pronto los
resultados previos del conteo dan una victoria como las “de edenantes” en las
que el tricolor “por órdenes del jefe” ganaba las elecciones. Ahora fue la ciudadanía,
aunque escasa, la que decidió que ya estaba harta de los amarillos y de otros
colores y se decidió por los tricolores que hoy día ya han anunciado el famoso “carro
completo” que aún o puede ser
considerado válido hasta en tanto el IFE no lo anuncie de manera oficial.
Desde luego que los
tricolores no pudieron esperar a que esto suceda y ante las tendencias que les
dan el triunfo arrollador, celebran desde anoche ante los resultados
preliminares.
Solamente nos queda
esperar que nuestra decisión haya sido la correcta y que, quienes resultaron
vencedores en la contienda, cumplan con las expectativas resultado de las
promesas que un día, durante su campaña, hicieran. Nada más pero tampoco nada
menos.
***
En esta aerolínea de
Samoa, que le voy a contar, no sólo se pesa el equipaje. Aquí, también se pesan
a los pasajeros. Samoa Air saltó a la luz hace unos meses cuando se convirtió
en la primera compañía en cobrar según el peso del pasajero y del equipaje. Y
ahora, introdujo la clase XL destinado para las personas que pesen más de 130
kilogramos. “Hemos retirado una fila completa de asientos, lo que significa que
hay mucho más espacio para las piernas del pasajero”.
Y es que en un país
donde según la organización mundial de la salud, 86 por ciento de la población
tiene sobrepeso, cobrar de esta manera tiene sus beneficios. Aunque inusual, la
medida parece ser aceptada por algunos clientes. “Fue extraño cuando me dijeron
que suba a la balanza. Yo dije que…? Sube a la balanza. Pero todo está bien, no
es tan malo”. Por el momento, las tarifas varían desde alrededor de un dólar
por kilo en vuelos hasta más de 4 y medio en rutas internacionales.
***
Tan acostumbrados
como estamos los mexicanos a copiar todo, o casi todo, que nos parezca “chido y
coqueto”, Aeroméxico ha comenzado, desde
hace algún tiempo, a cobrarle a los usuarios por todo.
¡Qué tiempos aquellos
señor don José! cuando abordaba usted su vuelo por la mañana, tarde o noche sin
haber probado bocado alguno porque había la seguridad de que abordo le
esperaba un suculento desayuno, comida o
cena servido por una esbelta y guapa aeromoza. Los tragos eran “gratinados” e
iban del mexicanísimo tequila hasta el “huisquilucán” escocés de su preferencia
y conocí a algunos personajes que pescaban horrendas guarapetas de altura y
bajaban del avión en calidad de bulto desconocido.
Ahora usted tiene
derecho a llevar 15 kilos de equipaje y como una pinche maletita pesa diez
kilos usted solo puede llevar dos calzones, una camisa y un pantalón. Si su
equipaje sobrepasa este peso usted lo puede llevar pero pagando una tarifa por
tamaño y peso de su equipaje. ¿Comida? Si, como no, las “amables aeromosas” le
ofrecen galletitas y refresco gratis, las chelas y los tragos se los cobran a
precio de centro nocturno. Así que un viajecito a la ciudad de México le puede
costar un ojo de la cara porque si bien el boleto le sale, aparentemente,
baratón, los “extras” lo disparan hasta las nubes en las que viajan los aviones.
¿Qué porqué hablamos
de aviones y del costo de los boletos? Pos porque la elección de ayer se parece
mucho, les salió carísima a los partidos políticos de media tabla y sotaneros
que tratando de subirse a este vuelo no se midieron a la hora de gastarse la
poca o mucha lana que les dieron para sus campañas, tal vez su exceso de
colgados no les permitió levantar el vuelo y si a eso le agregamos, como en el
caso de Alicia Ricalde en Isla Mujeres, el exceso de confianza la prepotencia y
el “así soy y qué”, resulta lógico que el vuelo azul en la paradisiaca isla, no
pudiera elevarse para aterrizar en el palacio municipal.
Ya iremos comentando
con usted las reacciones de los involucrados mientras tanto vamos dejándolo
aquí, nos vemos mañana cuando tengamos un número más de EL AJUSTE DE CUENTOS,
ahora y por favor, ya que todo pasó, olvídese del famoso “uno por cien” y regrese
a su camba habitual, no vaya siendo la de malas prque entonces sí que ya la…
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