martes, 10 de junio de 2014

¿CAYÓ EL AZUL? - ¿EL MUNDIAL EN PROBLEMAS?


Ayer se daba como la “nota del año” y de inmediato se iniciaron los trabajos para verificar la información relacionada con la supuesta muerte de Juan José Esparragoza Moreno, alias “El Azul”, uno de los principales líderes del Cártel del Pacífico, liderado por Joaquín “El Chapo” Guzmán. Hoy le puedo decir que nadie sabe nada de nada.
 

12 son los procesos penales que, desde 2001 a la fecha pesarían en contra del capo mientras fuentes del Gabinete de Seguridad informaron que se vienen realizando trabajos de investigación para la captura del capo, por lo que ahora se buscará confirmar por personal de las áreas de inteligencia, del mismo Gabinete de Seguridad, coordinados por el Centro de Investigación y Seguridad Nacional  (CISEN) lo publicado por el semanario Río Doce

La publicación indica que el capo habría fallecido de un infarto, mientras se recuperaba de un accidente, en un hospital cuya ubicación se establece en el Distrito Federal o en Jalisco.

Sin embargo hasta el momento no existen evidencias que confirmen la muerte de Juan José Esparragoza Moreno, “El Azul”, uno de los jefes del Cártel del Pacífico, dijo el procurador General de la República (PGR), Jesús Murillo Karam. No podemos confirmar nada, yo no tengo información”, dijo tras la firma del Convenio Iberoamericano contra la Delincuencia.

A través de redes sociales se difundió la noticia de la supuesta muerte de “El Azul”, incluso el portal Rio Doce señaló que sufrió un paro cardíaco, citando como fuentes a familiares. Ante la posibilidad de la muerte de Juan José Esparragoza Moreno, se dio a conocer que autoridades federales ya investigan. Sin embargo, el procurador respondió ante la insistencia de los medios: Yo no tengo información”.

Habrá que recordar que tras la captura de Joaquín "El Chapo" Guzmán, "El Azul" fue señalado como una de las dos piezas claves del Cártel que seguía en libertad.

***

Le recuerdo que este no es una columna deportiva pero cuando estamos a unas horas de que se dé el pitazo inicial de la Copa Mundial de Fútbol hemos de recordar que hace cuatro años, cuando Brasil ganó ser el país sede, Lula era presidente y declaró que se estaban comprometiendo a organizar “no sólo una Copa del Mundo, sino la mejor Copa del Mundo” y por ello quiso que los partidos se jugaran en 17 ciudades distintas y no en las ocho que sugería la FIFA. Y en cada una de ellas habría que  construir un estadio de futbol que cumpliera con los lineamientos de la FIFA porque ni el famoso Maracaná los cumplía.
Dilma Rousseff Presidenta de Brasil
 

Esto aún cuando complicaba de manera absurda la movilidad y la organización ya que, como escribiera Christopher Gaffney, profesor de la Universidad Federal de Río que ha estudiado la preparación de cara al Mundial y los Juegos Olímpicos de Río en 2016: Porto Alegre y Manaus están igual de cerca que Copenhague y Timbuktú; Cuiabá y Natal están tan distantes como París y Moscú.

Cuatro años después, la corrupción y los gastos estratosféricos en esta Copa del Mundo han sido lo que más ha trascendido del Mundial Brasil 2014 antes de su arranque. Hasta ahora y a punto de iniciarse, los gastos en infraestructura se calculan aproximadamente en 14 millones de millones de dólares. Más que Sudáfrica 2010 y Alemania 2006 juntos. Y en lugar de tener 17 estadios, Brasil se ha tenido que conformar con 12, que siguen sin estar listos.

Si los gastos hubiesen sido para mejorar el sistema de transporte público o carreteras, todavía habría algo bueno del río de dinero gastado hasta ahora. Pero todo se ha ido para estadios que se perfilan para ser unos enormes elefantes blancos una vez concluido el Mundial. Algo increíble en un país futbolero por excelencia.

Nada más hace falta tomar en cuenta el estadio Mané Garrincha y sus enormes columnas de cemento que detienen un techo de alta tecnología que se limpia sólo ha costado 11 mil 500 millones de dólares.

Usted se preguntará, como millones en el mundo, ¿Qué tan grave es el escándalo de gastos y corrupción en Brasil que no sólo hemos visto enormes manifestaciones en las calles de las principales ciudades sino que incluso la gran estrella del futbol, Pelé, ha salido a decir que es una vergüenza lo gastado y lo mal preparado que se encuentra su país para esta Copa del Mundo?.
 

Por su parte la presidenta Dilma Rousseff ha tratado de calmar los ánimos y de justificar que los planes han sido tan ambiciosos que por ello no todos los estadios están listos, pero que lo estarán para el jueves que arranque el Mundial. Ya solo le quedan dos días para cumplir con su promesa

Rousseff, que en estos momentos busca reelegirse en octubre, debe pensar que con que Brasil gane la Copa, su triunfo está asegurado. Pero con tanto escándalo de corrupción que ha exasperado incluso a los más fervientes seguidores del futbol, lo que se pretendía sería una fiesta de orgullo nacional se está convirtiendo en una pesadilla para miles de brasileños, Dilma Rousseff incluida.

***

Nos vemos mañana hora y lugar de costumbre cuando tengamos un número más de EL AJUSTE DE CUENTOS pero por ahora llévela suave, trabaje mucho, pórtese bien y sea feliz. Amen.

 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario