Puede ser la arrogancia producto del poder que ostentaba, puede ser la seguridad de que en México no hay cadena perpetua, puede ser también que, como dicen, sea verdad que es “informante” de la DEA y que por su calidad de ciudadano americano tendrá que ser extraditado toda vez que es reclamado por la justicia del vecino país y que como “testigo protegido” pueda lograr algún arreglo que le permita seguir en libertad vigilada en los Estados Unidos, pueden ser muchas las razones por las que Edgar Valdez Villareal mostrara esa sonrisa cínica y burlona que tanto llamara la atención de propios y extraños cuando fue “presentado” ante la prensa por las autoridades que le detuvieron, pueden ser muchas e ignoradas las razones de su pose de gran chingón, pero lo único cierto es que, para muchos, algo huele mal en este asunto.
Y es que, aseguran, luego de tantos palos que los malosos le han dado a Felipe Calderón y a su estrategia para combatirlos, resulta muy fuerte la carga de “sospechosismo” en torno a la detención de “La Barbie” a unas cuantas horas de su cuarto informe de gobierno.
En este sentido los muy aguerridos “analistas de los asuntos que tienen que ver con informes de gobierno” aseguran que La Barbie le dijo a Calderón: “me dejo apañar para que tengas algo que decir en tu informe y tú me mandas con los gabachos porque ya trancé ser “testigo protegido”, ¿Cómo la ves?” y que Calderón le contestó: “¡ya vas!, carnal”, deveritas que se pasan estos “analistas de…”
Sea como fuere son muchas las preguntas que, como otras, quizás nunca tengan una creíble respuesta ya que… ¿Será que el burro tocó la flauta? ¿Golpe mediático? ¿Regalo de los gringos a Calderón para subir sus bonos? ¿Traición para cobrar la recompensa de dos millones de dólares? ¿Cómo es que lo capturó la Policía Federal y no el Ejército ó la Marina? ¿Se entregó para acogerse al programa de testigos protegidos de los Estados Unidos? ¡vaya usted a saber!
La bien ganada fama de sanguinario que tiene Edgar Valdez no “caza” con la forma en que fue detenido ya que ninguno de los grandes capos como Arturo Beltrán Leyva ó Ignacio Coronel, por mencionar alguno, se dejaron atrapar con vida y prefirieron enfrentarse a tiros con la Marina ó el Ejército aún sabiendo que podrían morir, como sucedió, en el intento de escapar del largo brazo de la ley, mientras que Valdez Villarreal fue detenido sin un rasguño, recién bañado y bien vestido no como a los otros quienes, tomados por sorpresa, los agarraron en chanclas y en bermudas y playera, ó sea, más relajados pués, pa´que me entienda y nos entendámonos.
Si lo detuvieron ó si se entregó, da lo mismo, La Barbie está fuera de circulación y la venganza de quienes formaban parte de su grupo de choque está en marcha y ha desatado una escalada de violencia que solamente se podrá detener con acciones contundentes y no con palabras vacías al estilo Calderón, ¿no le parece?
De cualquier manera habremos de esperar a que se cumpla el plazo de 76 horas que marca la ley para saber cual será la suerte de Edgar Valdez quién, seguramente será deportado si es que antes no pasa nada extraordinario.
Así las cosas mejor vamos dejándolo aquí, nos vemos en el próximo número de EL AJUSTE DE CUENTOS, por ahora seguiremos esperando noticias de Paco en torno a la toma del Castillo, pero mientras tanto ya no le haga usted más al cuento no vaya siendo la de malas porque entonces sí que ya la….
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