La tragedia con
tintes de comedia, muy barata por cierto, titulada “Oigo tus pasos, tu caminar”
cuyo protagonista es Eduardo Espinosa Abuxapqui, edil de Othón P. Blanco, nos
recuerda a otro personaje que quiso ser gobernador y que pensó que para lograrlo
tenía que estar informado de los movimientos de los rivales, que solo existían
en su acalorada mente, y por eso instaló un “centro de información” en una casa
donde contaba con sofisticado equipo de escucha y video grabación para seguir,
paso a paso, las actividades de sus “enemigos políticos”, enemigos que se equipo
cercano le había hecho creer que existían para seguir colgados de la ubre. ¿Lo
recuerda? se llama Gregorio “Greg” Sánchez.
Hoy se sabe que Eduardo
Espinosa estaba orejeando y campaneando
al edil de Benito Juárez, Paul Carrillo, al Gobernador Roberto Borge e incluso
al insignificante voz-cero estatal Rangel Rosado así como a varios diputados y
dirigentes de su tricolor partido.
Desde luego que
cuando le preguntaron el dijo que lo del centro de espionaje es una “mentirototota”
que lo pueden esculcar y que no le van a encontrar nada porque el nada tiene
que ver. En cuanto a lo de su declaración patrimonial dijo que todo está
apegado a derecho ¿o sea que no hay nada chueco?
Como quiera que sea aquel
que en el pasado reciente recibía muestras de cariño y apoyo por parte de los
othonenses hoy ve como esa popularidad ha bajado tanto que los que antes le
aplaudían hoy le reclaman a gritos y él
sigue encerrado en su concha y cerrando los ojos a una realidad que pudiera
aplastar, definitivamente, sus añejas aspiraciones de gobernar el Estado.
***
Aunque usted no lo
crea, hasta ahora el caso de "lavado de dinero" destapado por
autoridades federales en la empresa subcontratista, Oceanografía, que operaba
para Petróleos Mexicanos (Pemex), representa un caso difícil de resolver por la
maraña de complicidades que tendrá que demostrar, pero que en la mira de la PGR
figuran empresarios, digamos de alto nivel por no decir de muy alto nivel.
Las investigaciones
contra los hermanos Javier y Óscar Rodríguez Borgio y Martín Díaz Álvarez
comenzaron en 2012, luego de que la Procuraduría General de Justicia de
Querétaro desmanteló a un grupo delictivo dedicado a la ordeña de ductos en San
Juan del Río y Huimilpan.
De entrada las
acusaciones apuntaron a que uno de sus principales clientes era la empresa
Grupo Gasolinero Mexicano (GGM), del que fueran dueños los hermanos Rodríguez
Borgio, quienes presuntamente expendían la gasolina robada en más de 61
gasolineras de su consorcio. Por tratarse de un delito federal, la PGR y la
Policía Federal Ministerial cateó las oficinas de GGM; sin embargo
aparentemente no pasó nada, incluso se dijo que la investigación se congeló
para se reactivó en diciembre pasado.
A mediados del mes
pasado, se reveló que la PGR investigaba a Caja Libertad, los casinos Big Bola
y al equipo de futbol Querétaro, por estar involucrados en una "maraña que
involucra el robo de combustibles". Y otra vez, el nombre de los hermanos
Rodríguez Borgio resaltó como por ser propietarios de las casas de apuestas y
de Libertad, Servicios Financieros.
Otro personaje en la
investigación es Martín Díaz Álvarez, responsable financiero de Libertad y
segundo accionista en importancia de Oceanografía, empresa propietaria de
Gallos Blancos. Sin embargo, el lunes pasado la empresa Libertad Servicios
Financieros anunció que Martín Díaz Álvarez, presidente del Consejo Administración,
curiosamente, se retiró del cargo el 1 de marzo o sea el sábado pasado cuando
ya el agua le llegaba a las rodillas. Díaz Álvarez es reconocido como
accionista de Oceanografía, empresa propietaria del equipo de futbol Gallos
Blancos, que ahora es investigada por "lavado" de dinero y acusada de
fraude por el Grupo financiero Citi-Banamex.
En días pasados, a
través de su cuenta de Twitter (@JavierRBorgio) el empresario afirmó; "No
soy socio de Oceanografía". Explicó que él era un proveedor, "les
rentaba barcos; servicio que no me pagan desde hace 10 meses. También tienen
deuda conmigo", señaló y aquí es donde brinca la pregunta ¿Qué arrendador
aguanta que no le paguen la renta durante diez años?. Los barcos ¿son de su
propiedad? Si lo fueran ¿de dónde sacó la lana para comprarlos? Porque un
barquito de esos no cuesta diez pesos ¿está usted de acuerdo?
Según la información
divulgada, existían indicios de que algunos de los 38 barcos que pertenecen a
Oceanografía son de los hermanos Rodríguez Borgio y eran alquilados a la
empresa naviera, que a su vez le cobra a Pemex por la renta de los mismos.
***
Aún con todo lo
anterior la investigación sobre el fraude cometido por Oceanografía contra el
Banco Nacional de México (Banamex), según el procurador Jesús Murillo Karam, "hasta
este momento no toca a Pemex, pero continuarán las investigaciones para determinarlo.
La PGR tiene que hacer una investigación muy detallada, muy cuidada, para poder
tratar de salvar lo más posible esto y además para cuidar derechos
fundamentales que hay ahí y por otro lado, en las responsabilidades ser muy
contundentes porque en el momento en que acusemos a alguien tenemos que tener
todas las pruebas. Hasta el momento la Procuraduría no ha dado uno sólo nombre,
porque nosotros no acusamos más que cuando tenemos las pruebas en la
mano".
Y aseguró que:
"Necesitamos ser muy cuidadosos, muy precisos, es un asunto delicado, es
un asunto en el que no es solamente la afectación al banco, sino el riesgo que
pudieran correr los mismos trabajadores, el riesgo que pudiera correr la
operación misma de Pemex, entonces debemos ser muy cuidadosos". Asimismo,
detalló que por la forma en que está constituido el fraude es un asunto que
hasta este momento no toca a Pemex, "pero no sabemos, vamos a continuar
con la investigación para determinarlo". ¿Cómo la ve?
***
Por hoy vamos dejándolo
aquí, nos vemos mañana hora y lugar de costumbre cuando tengamos un número más
de EL AJUSTE DE CUENTOS mientras tanto llévela suave, pórtese bien y sea feliz.
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