Esta que hoy le voy a contar resulta
ser muy reveladora de que pertenecer “al partido”, cualquiera que este sea, o
ser “el candidato”, a lo que sea, no es garantía de nada. Es más, en algunos
casos el pedorrearse, perdón, el presumir de ser tal o cual cosa pudiera salir
contraproducente.
Como si fuera un ser apestado o tuviera
una enfermedad de esas que dan harta comezón y son altamente contagiosas, como
si su dinero no valiera lo mismo que el de un exitoso empresario o fuera mal
habido… en fin, todo lo más gacho que se les ocurra, así un club de golf nos
trata al flamante candidato a la gubernatura de Tamaulipas, el panista
Francisco García Cabeza de Vaca. Esta es su triste historia que pudiera ser un
capítulo exitoso para la churronovela “Lo que Callamos los
Políticos”. Le cuento….
En 2013, al mentado miembro del
blanquiazul le tocó una tanda bastante choncha, así que se dio unos de esos
lujitos que todo mundo puede darse de vez en cuando: se compró un departamento
ubicado en un fraccionamiento muy popof de Santa Fe en la CDMX. Cosa de nada:
el inmueble ronda los 3 millones de dólares, según fuentes consultadas por
Reforma.
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| Francisco García Cabeza de Vaca |
Sin embargo, por mucho varo que soltó,
al entonces senador le fue negado el acceso como socio al club del lugar. Al
parecer, al político no le dijeron que la compra del departamento no
garantizaba el acceso al club, el cual sólo es por autorización del consejo de
administración… y pues el buen García Cabeza de Vaca no pasó la prueba o
sea, “el malishímetro”. Bueno, eso y además falseó información respecto a la
compraventa de una acción del club, esto con el propósito de hacerse pasar como
socio del lugar.
Peor no le pudo ir al panista: además
de ser acusado en su Estado de tener vínculos con grupos criminales, ahora no
puede echar el golf como la gente decente… hecho que no sólo lo tiene bastante
quemado con la banda de su fraccionamiento, sino que ha impactado en su
autoestima: “La negativa a permitirnos el acceso al
referido club nos menosprecia, desmerece y desvaloriza frente a terceros”, reclamó el político, quien anda
pidiendo una indemnización por daño moral contra él y su esposa porque la
situación lo coloca como un personaje con “antecedente personal
cuestionable”.
Aunque el pasado 13 de octubre una
jueza de la Ciudad de México ordenó al club ya no ser gachos y que dejen a
Cabeza de Vaca jugar en sus campos, la decisión fue apelada por la
administración del club de golf ante el Tribunal Superior de Justicia… ya que,
a diferencia de muchos votantes, ahí sí hacen una estricta revisión de los
nuevos socios.
Lo dicho, con dinero puedes comprar
casi todo, casas, departamentos y carros de súper lujo, alhajas de oro y
diamantes, pagarte vacaciones a destino que jamás soñaste pero nunca podrás
comprar clase, moral, buenos modales, respeto, personalidad, sentido común,
humildad, integridad y un muuuy largo etc. ¿No le parece?
***
Le recuerdo
que esta No es una columna deportiva pero no deja de llamarnos la atención la
nueva onda de mandamás de las “Chivas rayadas del Guadalajara”. Le cuento.
En días
pasados Jorge Vergara anunció la creación de Chivas TV, la
plataforma por internet que transmitirá los juegos del Rebaño Sagrado. Por
supuesto que esto es un paso sumamente transcendental en cuanto a medios y
futbol, saliendo de la dependencia de las televisoras.
Sin embargo, parece que no se tomó en
cuenta la cantidad de mexicanos que no tienen acceso a este servicio. Además, ahora salió el mandamás de
las Chivas a darle otro golpe a los aficionados: tendrán que pagar por ver los
partidos.
“Tiene
que haber un costo. A final de cuentas con este proceso porque esto es
una inversión, pero no quisiera adelantarme mucho porque nos falta mucho por
trabajar, nuestra preocupación es la gente que no tiene recursos y en eso nos
estamos enfocando para resolverlo de la mejor manera. Creo que estaremos listos
el 1 de junio para dar a conocer todo el plan”.
Si bien se comprende que es un negocio,
parece que Vergara al momento de hacer esta plataforma como que se olvidó de un
estrato social sumamente importante. Ahora, será aún más complicado que una
persona pague su internet y además, su suscripción a Chivas TV.
Además, se le sumarán pérdidas
millonarias al equipo por esta inversión y lógicamente, dejar de recibir el
dinero del contrato con una televisora.
“Lo hicimos porque queremos acercarnos
mucho más con la gente. Nos asesoramos de gente experta que nos mostró el
camino a seguir y obviamente implica un gran riesgo, inversión, no recibir
ningún tipo de recurso por un par de años, dos o tres años, por lo menos y eso
obviamente afecta porque necesitamos invertir en el equipo y estamos dispuestos
a hacerlo porque nuestro objetivo a mediano plazo es estar con toda la gente y
estar metidos en sus casas. Perderemos alrededor de 30 millones de
dólares. Nos aventamos y ya estamos en el barco”.
Repetimos, el atrevimiento de Vergara y
las Chivas al hacer esto es digno de admiración. No se especificó el costo del
streaming ni muchos detalles más, así que aún queda mucha información que
revelar y aquí estaremos pendientes.
-Pos yo lo veo medio canijo compa
porque, como quiera que sea, tenía asegurada una buena lana de las dos
televisoras que pasaban los partidos de Chivas y ahora va a tener que poner de
su bolsa
-La mera verdad “Manís” si está cañón
porque ¿Cuántos seguidores tiene Chivas? ¿Cuánto les va a costar ver sus
partidos? ¿Cuántos tienen la lana suficiente para pagar su “cable”” y además el
Chivas TV? ¿Tiene tanta lana como para aguantar dos o tres años para quedar
tablas con su inversión y luego otros dos o tres para comenzar a ver sus
ganancias?
-Pos pa´mí que en tres años vuelve al
redil y entonces las televisoras, una de dos, o lo mandan a la goma o le pagan
una miseria por pasar los partidos del “Rebaño Sagrado” a no ser que en estos
años mejore su posición en la tabla.
Y a todo esto usted apreciado, por
aferrado, lector ¿Qué opina?
***
Luego de este paréntesis deportivo sigamos
con lo bueno porque usted seguramente recordará que ya en algunas ocasiones le
hemos contado y comentado de algunos, muy sonados, casos de corrupción de
algunos servidores públicos a los que les gusta llamarse “de primer nivel”, aun
así, los legisladores se siguen haciendo güeyes con las iniciativas
anticorrupción. Bueno, ni tan güeyes entonces.
De acuerdo a datos revelados en la
tercera Encuesta Nacional de Calidad e Impacto Gubernamental (ENCIG),
correspondiente a información recogida en 2015, el 90% de los mexicanos ya está
harta de ver cómo la corrupción se ha vuelto parte de la vida diaria. Tanto así
que entre 87.2 y 90.4% de los encuestados considera que la corrupción es una
práctica “muy frecuente / frecuente” en el país.
Lo anterior no quiere decir que la
gente ve con buenos ojos este problema, por el contrario: la encuesta publicada
por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), destaca a la
corrupción como el segundo mayor problema que hay en el país… sólo atrasito de
la inseguridad y la delincuencia.
Pero bueno… es cultural, dicen las
autoridades. Y sí: para que vean como desparramamos cultura por todos lados, la
corrupción, en primer lugar, se percibe por el lado de las corporaciones
policíacas (89.8%), también se deja sentir por parte de los partidos políticos
(88.6%)… y, claro, se detecta que el gobierno federal aporta su riqueza en el
asunto: 81.8%.
No hay exclusión: los gobiernos
estatales aportan su granito a esta despreciable cultura (81.6%) y tampoco se
deja fuera a esos personajes que tan bien la representan: los legisladores
(80.8%), quienes, preocupados por conservar nuestra cultura (eso que es tan
nuestro), se han negado a avanzar en la creación de un Sistema Nacional
Anticorrupción.
Según reporta Reforma, lo anterior se
ve un poco sospechoso para los empresarios del país, quienes irán antes
instancias internacionales (como la OCDE), para denunciar que tanto senadores y
diputados han hecho caso omiso a sus muy diversos señalamientos de corrupción.
Falta de confianza: si no les han hecho
caso a las demandas de corrupción, nomás aflojen un billetito. Seguro así se
agilizan.
Así las cosas mejor aquí le paramos,
nos vemos mañana, hora lugar de
costumbre cuando tengamos un número más de EL AJUSTE DE CUENTOS pero ahora, y
por favor ya no le haga usted más al cuento y ¡ya váyase a trabajar! ¿no le
parece?
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