Ya hemos comentado con usted acerca del problema de salud que representa la obesidad infantil y que ha llegado a ser considerado “un problema nacional” toda vez que el número de niños “gorditos” va en aumento ante la falta de información por parte de los padres de familia que ven a sus hijos con sobrepeso “muy saludables” cuando en realidad están expuestos a sufrir graves padecimientos que, incluso, les pueden causar la muerte y todo gracias a la obesidad.
El pleno del Senado entró a la discusión formal este miércoles del polémico dictamen Antiobesidad, al cual se le dispensó la segunda lectura, y se espera que hoy mismo sea votado.
El documento, agendado en la Gaceta del Senado, incluye una serie de medidas para contrarrestar el fenómeno de la obesidad, y otros trastornos alimenticios.
Se espera una reunión áspera en tribuna, ante la presentación de "reservas" a varios artículos, y donde cada senador deberá de exponer sus argumentos.
La semana pasada se supo de un caso de conflicto de interés en este tema, debido a que la senadora del PRI, María del Socorro García Quiroz, tiene una relación con la familia Ruiz, que es embotelladora de la Coca Cola en Querétaro.
En tribuna, la primera en hablar es la senadora del PAN, María Teresa Ortuño, presidenta de la comisión de Educación, quien habla sobre las bondades de este marco legal, para combatir la obesidad y otros trastornos alimenticios y pidió al pleno el voto a favor, al señalar que van dos años de discusiones.
Este es, sin duda alguna, un tema muy difícil de resolver ya que las embotelladoras pagan a las cooperativas ó tiendas escolares, fuertes cantidades de dinero para que sus productos tengan la “exclusiva” en las escuelas y esta práctica es secundada por los fabricantes de frituras, pastelitos y demás que además de no aportar ningún elemento nutricional, están hechos a base de harinas, dulcorantes y saborizantes artificiales que solamente contribuyen a elevar el sobrepeso de los niños consumidores de estos productos.
Es en este punto en el que las “sociedades de padres de familia” de las escuelas, deben tomar cartas en el asunto y vigilar que lo que las cooperativas ó tiendas escolares les ofrezcan a sus hijos sean alimentos sanos, como ensaladas de frutas frescas de la estación jugos ó licuados de frutas con agua ó con leche y no frituras y refrescos embotellados cuyos niveles de azúcar y conservadores son sumamente nocivos para los chavitos.
Sin embargo, las antenas instaladas en la capirucha, nos informaron que el Senado reculó de última hora y, a propuesta del PRI, canceló cambios que ya había aprobado en la Ley Antiobesidad, y que la hacían más severa al prohibir la venta de alimentos y bebidas chatarra, así como su publicidad en escuelas y centros deportivos.
Así, en unos minutos, lo que se aproximaba a ser una reforma con "dientes" para contrarrestar este problema de salud pública, se transformó en un dictamen frustrado, pues el pleno acordó regresar los polémicos artículos a comisiones, donde podrían quedar congelados.
El PRI, a través de Francisco Arroyo Vieyra, argumentó ante el pleno que los cambios generaban contradicciones (antinomias) en el dictamen, por lo que propuso echar atrás lo avalado.
De esta forma, el trámite quedó inconcluso, ya que el paquete de reformas sólo fueron aprobadas en lo general, y faltó concluir el trámite de los artículos reservados en lo particular. Se espera que mañana jueves la revisión de la ley continúe.
El dictamen original sólo planteaba "limitar" la venta y la publicidad de comida chatarra y los cambios se dieron luego de un intenso debate en el que tricolores y azules se dijeron de todo e incluso se acusaron mutuamente por el conflicto de intereses y es que la danza de los billetes por parte de las transnacionales involucradas es bastante grande.
Antes de que planteara detener los cambios al dictamen, la bancada del PRI vez emitió un comunicado en el que rechazó que exista algún conflicto de interés para frenar el dictamen, ante los señalamientos contra la senadora María del Socorro García, y sostuvo que sus colaboraciones han servido para mejorar las reformas.
Este es el nivel de la política de este país donde nuestros diputados y senadores se pelean hasta por una coca-cola y un gansito.
Así las cosas mejor vamos dejándolo aquí, nos vemos mañana cuando tengamos un número más de EL AJUSTE DE CUENTOS pero ahora y por favor ya no le haga usted más al cuento, mejor váyase por una coca y un gansito, total que ya sabemos que es usted un fanático de la comida chatarra ¿ó no?
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