La tarde de ayer, como muchas tardes en el Distrito Federal, fue una tarde lluviosa y a pesar de la lluvia, decenas de seguidores y simpatizantes de Andrés Manuel López Obrador se apostaron en los accesos principales del hotel del Centro Histórico en donde el abanderado de la Coalición Movimiento Progresista ofreció una conferencia de prensa frente al resultado de la elección presidencial de este primero de julio.
Una vez más el candidato de las izquierdas, pidió esperar los cómputos finales, los cuales se presentarán el miércoles, pero además, también una vez más tal y como lo hiciera hace seis años, recalcó que impugnará las elecciones.
A los integrantes de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) les manifestó que presentarán pruebas, si tenía, sobre las irregularidades durante las elecciones, así como en no bajar la guardia y estar pendientes de los cómputos distritales. “Nuestra convicción es democrática y nuestro compromiso es respetar la elección popular para ello es imprescindible que no quede ninguna duda acerca de los resultados electorales esto, por el bien de México. Yo asumo mi responsabilidad, pero la responsabilidad constitucional recae en el Instituto Federal Electoral y en el Tribunal Federal Electoral. Vamos resolviendo poco a poco lo que convenga”, aclaró el candidato de las izquierdas.
En medio de su locura el tabasqueño dice que “Se votó por Enrique Peña Nieto para mantener el régimen de corrupción, no tengo la menor duda de que eso significa el voto, y sí, sí la vamos a impugnar” dijo en referencia a la elección.
-Oye carnalito, a ver si le entendí, si dice que se votó por Enrique Peña Nieto para mantener el régimen de corrupción ¿quiere decir que el actual régimen, o sea Calderón, es corrupto y que el PAN votó por el PRI? ¿No hubiera sido más fácil que el PAN votara por el PAN, o sea por Josefina, para que fuera la tapadera del régimen corrupto de Calderón? La mera verdá, no entiendo a este cuate, pa´mi que le hace falta alguien que salga y diga “lo que Andrés Manuel quiso decir es…”
Pero se lanza a fondo cuando dice que “Fue avasallador el comportamiento de los aparatos gubernamentales. Nada más el IFE registró más de tres mil incidentes en casillas, muchos en el Estado de México. No podemos aceptar un resultado fraudulento, hay procedimientos para eso, vamos a presentar las pruebas, hay muchos elementos para decir que se violó el artículo 41 de la Constitución, que establece que debe haber equidad””
Desde luego que esta postura ya se ha convertido en un “clásico”, en un caso que merece la atención urgente de un psiquiatra y no resulta nada raro el que amague con impugnar el resultado de la elección ya que se ha vuelto un adicto a los reflectores que cuando ve que estos se alejan de él para seguir al que parece ser el ganador, enseguida pega de gritos y se llama robado aún y cuando el conteo de los votos depositados en las urnas le resulta adverso a su añejo sueño del “Quiero ser Presidente” y si no es por la vía del voto pues entonces será “a huevo”.
Por su parte el presidente nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Jesús Zambrano Grijalva, reiteró que la actuación de su instituto político siempre será con estricto apego a la ley, de forma pacífica y en defensa del voto. A través de su cuenta de twitter, el líder del partido del sol azteca reiteró la postura asumida la víspera por el candidato presidencial de la coalición Movimiento Progresista, Andrés Manuel López Obrador, luego que se diera a conocer los primeros resultados preliminares oficiales de la elección federal. Lo dicho “Dios los crea y ellos se juntan”.
Ahora que, una vez conocidos los resultados de lo que hasta el momento se ha contado de los votos emitidos el pasado domingo, corremos el riesgo de que la locura nos alcance ya que según los asegunes la cosa está así en Quintana Roo: AMLO 41.97%, EPN 33.29%, JVM 20.76%, GQ 1%.
Es así que el famoso “carro completo” que ruidosamente anunciaron los tricolores se volvió, de pronto, un carro amarillo en el que solamente el capirote es tricolor ante la mirada y el desencanto-frustración-encabronamiento de Pedro Flota, Rosario Ortiz y Roberto Borge que veían como, con el paso de las horas, “su” carro recibía una y otra y otra espesa capa de pintura amarilla.
Esto quiere decir que las maniobras de Betito y su grupo de “operadores” políticos no sirven pa´un carajo, como operadores no tienen ni la menor idea de lo que debían hacer y como políticos menos, son los mismos rémoras que viven pegados a la ubre viendo nada más para su interés personal, como el famoso “Lalo” que deja a un lado su actual encomienda para “operar” una campaña de la que $ólo él $alió ganador, muy ganador, y perdedores de siempre como “ViVi” que de eso de perder elecciones sabe y mucho. Ahora que….sería muy interesante el saber cuanta lana se destinó para las elecciones en el Estado, cuánto costaron las playeras, las gorras, los paraguas, los balones y todo lo que, con el emblema de su tricolor partido, regalaron para, a vuelapluma, calcular cuánto, más o menos, se llevó cada uno de este par de perdedores que resultaron más vivos que un gato.
Tomemos por ejemplo el caso de Laura Fernández ¿Por qué si siendo la “dama de compañía” de Félix, la que se pegó como lapa al exgobernador en todos sus eventos y le pedía que asistiera a los suyos, perdió ante Graciela Saldaña una exfuncionaria de medio pelo, novata en esto de la política, sin carisma y con escaso presupuesto? ¿Se cumplió la amenaza de las líderes de colonias que le repudiaban su “especial trato” hacia ellas? ¿Funcionó el voto de castigo en su contra? ¿Le falló su equipo de “asesores”? ¿Fallaron los “operadores” de su partido?
Por otra parte le cuento que el semanario inglés The Economist, en su edición del pasado 22 de Junio, aseguró, en su editorial “Regresando al futuro”, que el candidato priista a la presidencia, Enrique Peña Nieto, “es la opción menos mala” para México.
Agrega que “estas elecciones tendrían que haber sido ganadas por la izquierda. Si su candidato presidencial hubiera sido Marcelo Ebrard, un moderno socialdemócrata y jefe de gobierno de la Ciudad de México”, y quien habría obtenido “el voto” de este medio británico. “En cambio, la izquierda (PRD, PT y Movimiento Ciudadano) está otra vez representada por Andrés Manuel López Obrador, cuyo carácter es mesiánico y su comportamiento vergonzoso, después de haber perdido por un estrecho margen en 2006 y haber declarado la guerra a las instituciones. El PAN de Josefina Vázquez Mota es digno, pero ha tenido una campaña caótica”, reveló el semanario.
¿Por qué regresaría el PRI?: Hoy los votantes mexicanos, que hace 12 años sacaron al PRI del poder, podrían regresarle la corona este 1 de julio con Enrique Peña Nieto, “un hombre de 45 años, telegénico, fresco, rodeado de un grupo de tecnócratas salidos de las mejores universidades del mundo”, indica The Economist.
El semanario agrega que el abanderado del tricolor es “heredero de la más retrógrada maquinaria política del PRI. Sus aliados incluyen antiguos caudillos y sus opositores lo involucran en prácticas sospechosas, tales como la compra de cobertura televisiva”.
The Economist cuestiona: “¿Por qué México está a punto de dar un paso aparentemente hacia atrás?” e indica que la respuesta comienza con los decepcionantes últimos doce años en el poder del PAN, primero bajo Vicente Fox y Felipe Calderón. “Golpeados por la competencia china y luego por la recesión estadounidense, la economía apenas ha crecido 1.8% entre 2000 y 2011. Y la pobreza ha aumentado”.
En este contexto, ambos mandatarios vieron mermada su capacidad de maniobra en las reformas estructurales “a falta de una mayoría en el Congreso, dejando más o menos intacto el legado del PRI: los monopolios públicos y privados que ahogan la economía y el sistema educativo”. Sin embargo, The Economist remarca los logros económicos en las administraciones panistas.
Por su parte, Calderón optó por hacer de la seguridad y la lucha contra el narco las piezas centrales de su presidencia. Sin embargo, con 60,000 muertos, los mexicanos están cansando de la “guerra contra las drogas”, que en un primer momento apoyaron.
Los puntos positivos para EPN The Economist enumera algunos puntos positivos del priista: ‘las reformas de bienvenida’, como la apertura de Pemex a la inversión privada para reducir la dependencia del estado a los ingresos petroleros.
En materia de seguridad, quiere una policía federal mucho más grande y una nueva policía municipal. Asimismo, se concentrará en erradicar la violencia, en lugar de acabar con el tráfico de drogas.
The Economist concluye diciendo que los opositores temen por una “restauración del antiguo régimen”; sin embargo, asegura que “la democracia de México en el último cuarto de siglo se ha visto nutrida de algunas instituciones independientes como la Suprema Corte de Justicia de la Nación, el Congreso, el Banco de México, los medios y las redes sociales”.
“Todo ello significa que si Peña Nieto busca la restauración de dicho régimen, se enfrentaría a la resistencia. Por lo que sería mejor para él, así como para México, que aproveche la oportunidad no sólo para llevar la reforma económica, sino también para contrarrestar los fantasmas del PRI para ofrecer un país limpio y un gobierno responsable”.
Así es como nos ven, y digo “nos” porque todos estamos en el mismo barco, en el exterior y yo les concedo razón ¿usted no?.
Así las cosas mejor vamos dejándolo aquí, nos vemos mañana cuando tengamos un número más de EL AJUSTE DE CUENTOS pero ahora y por favor ya no le haga usted más al cuento, el PRD ganó la presidencial en Quintana Roo y según el humor en que se encuentre aquél que le conté, algunas “figuras” del gabinetazo que actuaron como “operadores” pudieran, también, perder la chamba, al tiempo.
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