jueves, 19 de mayo de 2011

Y USTED ¿ALGUNA VEZ USÓ ACORDEÓN?

En este nuestro “México Lindo y Querido” desde tiempo inmemorial se nos ha dado de manera muy natural el copiar, imitar o “fusilar”, como usted quiera decirle. Basta darse una vuelta por cualquier tianguis para encontrar todo tipo de artículos “chafa”. En la capital del país, el “barrio bravo” de Tepito es considerado como el mercado más grande del país en cuanto a falsificaciones se refiere y donde usted podrá encontrar desde bolsas “Prada”, perfumes “Chanel”, plumas “Mont Blanc” hasta medicamentos que “aumentan el poder sexual” y calzones de marca, todos falsificados, o sea, copias algunas muy buenas y otras de plano muy burdas.


El copiar su ha vuelto parte de nuestra identidad, en cualquier momento y a la primera oportunidad, copiamos por ejemplo….

¿Cuántas veces copiaste en un examen? No mientas, todos los de rodada 40, 50 o 60 como usted o como yo, alguna vez volteamos a ver la prueba de algún compañero, tal vez sólo para "comparar" respuestas, pero lo hicimos no me digas que no.

Una de las técnicas más comunes para copiar era el famoso "acordeón", un pequeño papel donde se ponían los puntos clave del examen, para después ser doblado en honor al nombre que se le dio. Otras técnicas incluían escribirse en las manos y piernas las respuestas, o tener un ojo muy ágil para voltear al examen el compañero.

Aunque, todas esas técnicas funcionaban muy bien, los tiempos han cambiado y también las maneras de copiar; la tecnología llegó a desplazar los acordeones. ¿Cómo? Hoy en día, los estudiantes se fían de “gadget” y algunos trucos nuevos para “engañar” a sus maestros y "pasar" sus pruebas.

De acuerdo con yahoo.com, hoy día, los acordeones fueron desplazados por celulares con bluetooth o internet, iPods, cámaras digitales, manos libres y algunos otros Gadgets. Aparatos que ponen en desventaja, a todos aquellos maestros que no están actualizados con la tecnología y según un análisis dado a conocer recientemente, la tecnología es un arma de dos filos en las escuelas, puesto que además de utilizarse para agilizar y mejorar los métodos de estudio, también funciona para hacer trampa.

Además, diferentes escolares explican sus métodos con facilidad, asegurando que a la fecha muchos maestros no pueden darse cuenta de lo que está pasando en un examen, mientras cree que todos están muy callados y en su lugar concentrados en sus respuestas y la realidad es que los alumnos, a través de sus dispositivos móviles, pueden buscar la información en internet, dictarse por medio del manos libres, pasar respuestas por medio del bluetooth y más.

Otros alumnos sólo buscan actualizar las técnicas viejas, por ejemplo haciendo acordeones que simulen la etiqueta de un refresco, que hacen a través de programas de diseño fáciles de manejar, que pueden encontrar gratuitamente en internet. Algunos otros prefieren arriesgarse un poco más, y para ello cuentan con diversas páginas de internet, como noestudies.com, donde se comparten consejos para hacer los mejores acordeones, pasar el examen y, por supuesto, no ser descubiertos.

Asimismo, en el canal de videos YouTube, se pueden encontrar diferentes tutoriales que explican a la perfección miles de formas de hacer trampa en las prueba. Así que prácticas para copiar o hacer trampa, clásicas o actuales, están a la orden del día. Y es que, es imposible negar lo evidente: todos hemos copiado alguna vez, ¿o no?

Así que si alguna vez usted ha presumido de tener en casa al alumno más destacado de su clase, de su generación y de su escuela ¡aguas! porque posiblemente esté usted alimentando, vistiendo y “educando” a un futuro falsificador de ropa, accesorios, obras de arte y hasta dólares, todo es posible, aunque en este último caso bien puede usted hacerse de la vista gorda y disfrutar de las “habilidades” de su querubín haciendo ese viaje a Las Vegas que siempre ha soñado o cuando menos probar suerte en los casinos de Belice o Cancún ¿no le parece?



Por hoy vamos dejándolo aquí, nos vemos mañana cuando tengamos un número más de EL AJUSTE DE CUENTOS pero ahora y por favor ya no le haga usted más al cuento, si va a copiar pos copie las cosas buenas de los demás y no las malas, no vaya siendo la de malas porque entonces sí que ya la….

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