Hoy, por fin, es el último día de las famosas campañas en las que las descalificaciones de ida y vuelta, la guerra de pestilente lodo y las promesas fueron el denominador común en todos los frentes.
Lo que sigue es que en las próximas horas, si no es que ya ocurrió, ajustando las agendas de los candidatos a la Presidencia, en la sede del Instituto Federal Electoral (IFE), con aval de los presidentes de los partidos políticos y con agrupaciones sociales como testigos de honor "se firmará el pacto contra la violencia y el respeto absoluto a los resultados de la decisión ciudadana en las urnas", anunció ayer por la tarde Leonardo Valdés.
El presidente del IFE precisó que se ajustan ya los últimos detalles "el documento que estamos elaborando implica varias cosas, entre ellas, el compromiso de los candidatos ha acatar el resultado de la elección en los términos que de a conocer el IFE y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF)”.
Sin embargo y siguiendo fiel a su añeja costumbre de dar “la nota”, Andrés Manuel López Obrador se dijo dispuesto a firmar el pacto de civilidad que perfila el IFE para esta semana, después del 27 de junio, una vez que terminen las campañas donde se establece el compromiso para los cuatro candidatos presidenciales de respetar el resultado de las elecciones del próximo domingo y no generar actos de violencia.
Pero no necesariamente será suscrito de manera personal por el tabasqueño, pues ello dependerá de que se lo permita su agenda, por lo cual aseveró que en su caso el documento lo firmará su coordinador de campaña, Ricardo Monreal, o bien su representante ante el IFE, Jaime Cárdenas.
López Obrador reconoció que no le alcanzan los votos del Movimiento Progresista (PRD, PT y Movimiento Ciudadano) para ser presidente electo, pero confió en la ciudadanía para que le garantice la victoria.
“No me alcanzaría obviamente sólo con los militantes del PRD-PT-Movimiento Ciudadano, si voy arriba es porque tengo votos de ciudadanos independientes y del PRI y del PAN, eso es lo que está sucediendo”, presumió.
En su última rueda de prensa mañanera, el tabasqueño aseveró que “no habrá conflicto postelectoral” como vaticinan, pues confió en ganar, ya que consideró que no le alcanzará al priista Peña Nieto “ni con la canallada de Fox ni la guerra sucia”. ¡Amén!
Cuando policías matan policías, poniendo en riesgo la vida de inocentes que nada tienen que ver en sus menjurjes, como ocurrió en el siempre abarrotado AICM (Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México) se tiene que pensar, con justificada razón, que algo anda mal, muy mal.
Sin duda alguna, y muy a pesar de la PGR diga que no tiene datos que lo involucren, Héctor Velázquez Corona, director del AICM, tiene que estar metido hasta las orejas en el trasiego de drogas tal y como dice el Departamento de Justicia norteamericano que lo vincula con cárteles de la droga que utilizan el aeropuerto más importante de este país como el principal corredor de narcotráfico en el que, al parecer, cuentan con total protección de malos elementos de la PGR y el consentimiento y tolerancia de Velázquez Corona. ¿No le parece?
Aquí lo único que cabe es que las investigaciones lleguen hasta donde tengan que llegar para, sin tapujos ni tapaderas, se logre deshilar esta gran bola de complicidades entre policías y mafiosos.
Oiga, y usted ¿ya se armó “bebidamente” para pasar sin sobresaltos la “ley seca”? Le pregunto porque no querrá usted ser la burla de su cuatitud que, como buenos mexicanos y dedicados raja-trago, seguramente le caerán “de visita” el domingo, no permita que hablen mal de usted, vaya temprano a votar y luego prepare las botanas y demás implementos para pasar un domingo de elecciones y futbol.
Por hoy vamos dejándolo aquí, nos vemos mañana cuando tengamos un número más de EL AJUSTE DE CUENTOS ¿no le parece?
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