jueves, 18 de febrero de 2016

SE FUE EL PAPA "PANCHITO" - TAMBIÉN MAX VEGA TATO

Bueno, pues ayer por la noche el Papa Francisco, luego de cumplir la última parte de una gira corta pero extenuante para un hombre de su edad, culminó su primera visita a México y a “La Morenita” del Tepeyac.
Una visita que se caracterizó por los constantes señalamientos, algunos velados y otros directos, en el sentido, como dijo ayer en Ciudad Juárez, de que “la falta de oportunidades y trabajos bien remunerados mantienen las condiciones de pobreza, la cual es el mejor caldo de cultivo para que, sobre todo los jóvenes caigan en el círculo del narcotráfico y de la violencia”, en un encuentro con empresarios, trabajadores y líderes sindicales, en el que dejó en claro que la “explotación laboral no es el camino para una sociedad más justa”.

El Papa fue contundente cuando dijo que “Uno de los flagelos más grandes a los que se ven expuestos sus jóvenes es la falta de oportunidades, de estudio y de trabajo sostenible y redituable que les permita proyectarse, generando en muchos casos situaciones de pobreza. Y esta pobreza es el mejor caldo de cultivo para caigan en el círculo del narcotráfico y de la violencia”.
En el Colegio de Bachilleres de Ciudad Juárez, Chihuahua, el pontífice criticó que el “paradigma de la utilidad económica sea el principio que rige las relaciones personales lo que deriva en que la prioridad sea obtener la mayor cantidad de ganancias posibles, en el plazo más breve y a costa de lo que sea, incluso del bienestar de los trabajadores”.
Lo anterior, dijo, provoca la “pérdida de la dimensión ética de las empresas las cuales olvidan que la mejor inversión que se puede realizar es invertir en la gente, en las personas, en sus familias”.
Pero además subrayó que “la mejor inversión es crear oportunidades” y reprochó que actualmente la prioridad sea “poner el flujo de las personas al servicio del flujo de los capitales, lo que deriva en la explotación de los empleados como si fueran objetos de usar y tirar” y sentenció que a aquellos empresarios esclavistas Dios les pedirá cuentas”.
Remarcó que “el flujo del capital no puede determinar el flujo y la vida de las personas” e invitó a construir un México en donde “no haya personas de primera y de segunda o de cuarta, sino el México que sabe reconocer en el otro la dignidad del hijo de Dios”.
El pontífice advirtió que si no se cambia la forma de concebir las relaciones laborales sólo prevalecerá en México “la memoria de explotación, de salarios insuficientes, de acoso laboral, de tráfico de trabajo esclavo”. Y si no se atajan los principales problemas que aquejan al país, las siguientes generaciones respirarán “un ambiente viciado por la corrupción, la violencia, la inseguridad y desconfianza”.
Llamó a trabajar para evitar ese futuro y dejar a los hijos una “memoria de trabajo digno, del techo decoroso y de la tierra para trabajar”. Y reconoció que tomar el camino para enmendar el paradigma actual de priorizar el capital, no es fácil, pero hay que hacerlo porque “es peor dejar el futuro en manos de la corrupción, del salvajismo, de la falta de equidad”.
E insistió “sé que no es fácil poder congeniar en un mundo cada vez más competitivo, pero es peor dejar que el mundo competitivo termine determinando el destino de los pueblos”.
El obispo de Roma dijo que se debe entender que “el lucro y el capital no son un bien por encima del hombre, están al servicio del bien común”. Instó a “forjar el México que su pueblo y que sus hijos merecen”.
Y entonces aquellos que esperaban encontrarse con un “curita” bondadoso que solo venía a repartir bendiciones y a recibir el apapacho de millones de mexicanos ante la, muy grave, situación económica, la corrupción y la inseguridad que se vive hoy en nuestro país, se toparon de frente con un hombre que aprovechó su investidura para decirles que tienen al país entero al borde del precipicio y que, de no corregir el rumbo, corremos el riesgo de perder nuestro tesoro más preciado, nuestra juventud y entonces sí que ¡ya nos llevó el carajo! (eso no lo dijo el Papa, lo digo yo) 
Solo nos queda esperar a quienes son los dueños del billete grande y a los políticos que tiene la responsabilidad de llevar las riendas de este país, le caiga el veinte. ¡Amén!
***

A muchos políticos siempre les resultó incómodo por “revoltoso”, por presentar  denuncias por desapariciones de personas y de dineros, como los más de 200 millones que Greg Sánchez y Julián Ricalde desaparecieron en la transición de gobierno municipal, por hacer los señalamientos y nomenclatura de algunas calles de Cancún, trabajo que les correspondía a los Presidentes Municipales y que se negaban hacer “por falta de recursos”.
Ayer, finalmente, la muerte venció a quién fuera presidente de Ciudadanet en Cancún y activo promotor de Morena, Maximiliano Vega Tato.  Muchos ya podrán respirar y dormir más tranquilos. ¡Descanse en paz!   
Por hoy vamos dejándolo aquí, nos vemos mañana en Chetumal a donde voy a asistir al pachangón de doña Chely. Mientras tanto usted ¡ya váyase a trabajar! ¿no le parece? no vaya siendo la de malas porque entonces sí que ya la….


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