lunes, 30 de enero de 2012

MIGUEL NAZAR "LA BLANCA PALOMA" DE LA HISTORIA NEGRA, ISIDRO HASTA 2017

El pasado Jueves por la noche uno, porque hay muchos, de los autores de uno, porque también hay muchos, de los capítulos más espeluznantes de la historia negra de este país, Miguel Nazar Haro, entregó, por fin, la tarjeta de circulación.


El ex titular de la desaparecida Dirección Federal de Seguridad (DFS), falleció la noche del pasado jueves, a los 87 años de edad, en su domicilio al Sur de la ciudad de México víctima de un coma depresivo que acentuó sus enfermedades luego del deceso de su esposa, lo que “mermó su salud de manera significativa” según sus familiares.

Miguel Nazar, quien nació en 1924 en Tuxpan, Veracruz, se convirtió en uno de los jefes policiacos más controvertidos del país, pues se le relacionaba con los hechos ocurridos el 2 de octubre de 1968 en la Plaza de Tlatelolco. De igual manera enfrentaba acusaciones por el ilícito de privación ilegal de la libertad equiparable al secuestro por presuntamente haber intervenido en la captura y desaparición de Jesús Piedra Ibarra, hijo de Rosario Ibarra de Piedra, militante de la Liga 23 de Septiembre, quién fue detenido en Monterrey en 1975 y desde el momento de su detención no se volvió a saber de él.

Desde hace años, Nazar enfrentaba un proceso por el caso conocido como "Guerra Sucia", específicamente, por la desaparición de Jesús Piedra Ibarra, hijo de la senadora Rosario Ibarra de Piedra y luego de hacer una muy breve escala en el penal de Topo Chico en Monterey, fue enviado a su casa para que, en algodones, esperara lo inevitable.

Si usted es rodada 50 o un poco más, seguramente recordará (si no le ha atacado el alemán) que en la época en la que Nazar Haro fue titular de la desaparecida Dirección Federal de Seguridad se llevaron a cabo las peores torturas, desapariciones y violaciones a los derechos humanos de un sinnúmero de personas cuando actuó como el brazo ejecutor del Gobierno Federal como lo fuera también Arturo Durazo Moreno en la gestión de José López Portillo donde brilló, con toda intensidad, el “terrorismo de estado”.

En Diciembre de 2003 se giró una orden de aprehensión contra Nazar Haro y en Febrero de 2004 fue detenido e ingresado al penal de Topo Chico, en Nuevo León; sin embargo, fue trasladado al Distrito Federal debido a que la ley le permite a las personas mayores de 70 años el beneficio de la prisión domiciliaria.

En junio de 2005 fue incriminado por la Fiscalía Especial para Movimientos Sociales y Políticos del Pasado como presunto responsable de la desaparición de seis integrantes de la Brigada Campesina de los Lacandones, en noviembre de 1974. Sin embargo a finales de Septiembre de 2006, un juzgado federal lo absolvió de este cargo, al no acreditarse la existencia del cuerpo del delito.

Nazar Haro ideó, fundó y organizó lo que se conoció como la muy famosa “Brigada Blanca”, un ilegal grupo de policías y ex policías nunca reconocido, pero culpado de la desaparición, muerte y tortura de opositores políticos.

Tanto Nazar como Durazo son ya, parte de la historia, de la historia negra de este país que no se debe olvidar y que las nuevas generaciones de mexicanos deben saber para que no se repitan jamás porque “quién no conoce su pasado está en riesgo de repetirlo” y eso, me va usted a disculpar bastante, por dignidad, no podemos permitirlo. ¿No le parece?

Sin embargo y según la idiosincrasia del mexicano, “muere el hombre y nace la leyenda”….la leyenda negra, esa que estamos condenados a llevar en la memoria porque nunca vamos a poder saber la verdad de esos años aciagos para este país, la verdad se la llevó Nazar Haro a la tumba y ahora solo nos queda quién fuera su jefe durante el mandato de Gustavo Díaz Ordaz, Luis Echeverría Álvarez, quién, seguramente, también se llevará a la tumba la verdad de lo que ocurrió en la Plaza de las Tres Culturas de Tlatelolco en el fatídico ´68 y también lo del ´71.

Dicen que “muerto el perro se acabó la rabia” pero en este caso la muerte de Miguel Nazar Haro solamente ha logrado revivir el odio, el desencanto y la rabia de los familiares de quienes hizo desaparecer al ver que un sujeto de tal calaña haya librado la cárcel y el castigo más que merecido y del que la muerte lo libró.

Lo único bueno de todos esto es que ni siquiera estos hijueputas de antaño ni los de hoy día, por más que lo hayan intentando y lo sigan intentando, podrán acabar con el coraje y la voluntad de salir adelante que tenemos los mexicanos y que es nuestra marca de origen. ¡He dicho!

Y una vez dicho lo anterior, ahora les voy a contar que desde el pasado viernes se comenzó a gestar una rebelión en la CTM en contra de su líder, José Isidro Santamaría Casanova, a quién acusan algunos sectores de la central obrera de pretender eternizarse en el puesto que ocupa desde hace ya 18 años.

El banal argumento de los insurrectos es que el último período de Santamaría terminó el 10 de Diciembre del año pasado y no ha querido convocar a elecciones por lo que consideran que está violentando los estatutos de la central obrera con la intención de eternizarse, como don Fidel Velázquez, en el cargo.

Ángel Viveros del sindicato de músicos, Gonzalo Arjona de Comercio, José Luis Ramos de Transporte, Carlos Echeverría de Gastronómicos, Ramiro Chan de Lázaro Cárdenas y José Luis Briseño de Solidaridad, forman el grupo de “alzados” que desconocieron la convocatoria de Santamaría, según ellos, por no cumplir en tiempo y forma según los estatutos que marcan que debió haber convocado a elecciones 60 días antes del 10 de diciembre pasado.

Ayer domingo, con la presencia de Fernando Salgado, enviado especial del líder nacional de la CTM, Joaquín Gamboa Pascoe, se realizó, en Playa del Carmen, el Tercer Congreso Estatal de la central obrera que aglutina a 48 mil trabajadores de 112 sindicatos, y el resultado fue que Isidro Santamaría Casanova seguirá en el timón de la CTM en el estado por seis años más y colorín colorado.

La decisión de los trabajadores quintanarroenses fue avalada por Fernando Salgado y tuvo como testigo de honor al anfitrión Filiberto Martínez Méndez y como invitado especial a Roberto Borge quién reconoció el trabajo de Santamaría en beneficio de la clase trabajadora y “su contribución a la paz laboral, disponibilidad al diálogo, actitud propositiva, respeto a las instituciones y al marco legal”. Finalmente Borge tomó la protesta de rigor a Santamaría por un período más que finalizará en 2017.

Lo que sea de cada quién, Isidro ha logrado mantener en paz a los trabajadores del estado y cuando la situación económica del país enfrenta graves problemas de desempleo, los obreros de Quintana Roo conservan la calma que da la seguridad de contar con un trabajo digno que les permite llevar el pan a la mesa de sus hijos y contar con los beneficios que representan el estar afiliados a la central obrera más poderosa de este país. Enhorabuena Isidro.

Así las cosas mejor vamos dejándolo aquí, nos vemos mañana cuando tengamos un número más de EL AJUSTE DE CUENTOS, ahora y por favor ya no le haga usted más al cuento y ¡ya váyase a trabajar! ¿no le parece?, recuerde que hoy apenas es lunes, que usted no es gallina ni diputado y no vaya siendo la de malas porque entonces sí que ya la….

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